RESEÑA | TODOS DEBERÍAMOS SER FEMENISTAS - CHIMAMANDA NGOZI ADICHE

Un libro que recoge el trascendental y emblemático discurso que dio la autora en su TEDx Talk sobre lo que significa ser feminista en el siglo XXI.

Ser feminista no es solo cosa de mujeres. Chimamanda Ngozi Adichie lo demuestra en este elocuente y perspicaz texto, en el que nos brinda una definición singular de lo que significa ser feminista en el siglo XXI. Con un estilo claro y directo, y sin dejar de lado el humor, esta carismática autora explora el papel de la mujer actual y apunta ideas para hacer de este mundo un lugar más justo.

Hacía mucho tiempo que veía este libro por las redes y en todas las librerías, estas navidades por fin lo tuve en mis manos. 

Cuenta con apenas 64 páginas, se lee en un suspiro y es completamente inspiradora.

Éste no es un libro teórico sobre el feminismo. Si lo que buscas es instruirte y saber algo más, quizás este no sea tu libro. Si lo que quieres es conocer la historia de una mujer luchadora, entonces sí que lo es.

Chimamanda nos cuenta su historia. A través de su discurso, no sólo nos relata su experiencia como mujer feminista, sino también su experiencia como mujer africana feminista. En definitiva, cómo se dio cuenta de que era feminista y qué consecuencias tuvo esa decisión.

A los catorce años, su mejor amigo la tachó de feminista, y digo tachó porque ser feminista no es algo positivo. Y de aquí parte todo. Lo bueno de este libro - discurso - es que la autora cuenta su propia historia. Es íntimo y personal y muy real. Nos muestra la verdadera cara de la sociedad, de como nos hemos acostumbrado tanto a esos micromachismos que nos rodean cada día, y que ya no los percibimos ni como tal. Me ha sorprendido como muchas de las cosas que cuenta Chimamanda también para en mi país; es curioso, cómo el machismo influye en la vida de las personas, y cómo el feminismo se está elevando.

"Lo peor que le hacemos a los niños -a base de hacerles

sentir que tienen que ser

duros es dejarlos con unos egos muy frágiles.

Cuando más fuerte se siente obligado a ser un hombre,

más debilitado queda su ego.

Y luego les hacemos mucho más mal a las niñas, 

porque las criamos para que estén al servicio de esos frágiles egos masculinos".

Lo que más me ha gustado de este corto libro es la franqueza con la que se expresa la autora. Es un choque de realidad, y creo también que es una buena presentación hacia la escritora. A mí desde luego me ha conquistado, y sin duda me pondré a leer sus obras. 

Os dejo una cita que dice mucho más de lo que podría decir yo.

“¿Por qué la palabra ‘feminista’? 

¿Por qué no dices simplemente que crees 

en los derechos humanos, o algo así?”

Porque no sería honesto.

 El feminismo, obviamente, está unido al tema de los 

derechos humanos, pero el hecho de usar 

una expresión vaga como 

“derechos humanos” quiere decir negar lo 

específico del problema de género. 

Sería como callarse que las mujeres han sido excluidas durante siglos. 

Sería como negar que el problema de 

género afecta a las mujeres, y no al ser humano 

en general. Durante centenares de años, 

el mundo ha dividido a los seres humanos en dos categorías, para después excluir y oprimir a uno de los dos grupos.

 Es justo que la solución al problema reconozca este hecho. […] Mi definición de “feminista” es esta: un hombre y una mujer que dice sí, existe un problema con 

el género tal y como se concibe hoy en día y tenemos que resolverlo, 
tenemos que mejorar. Todos nosotros, mujeres y hombres, tenemos que mejorar.”